A veces, no es en si la cantidad de procesos que lleve un trabajo de restauración, ni si quiera la relevancia o no del artista que lo ha pintado. A veces estos temas no tienen la menor importancia cuando reparas en una sonrisa. Eso nos pasó con esta obra.
La problemática que tenía no significaba un reto importante en la tarea de restaurar, ya que los deterioros, no suponían un tipo de intervención diferente a la gran mayoría de obras. Estos deterioros eran:
- · Varios agujeros de pequeño tamaño con pérdida de soporte textil.
- · Bastidor, con cuñas en mal estado y acumulación de suciedad.
- · Deformación del soporte.
- · Leve craquelado de la policromía.
- · Leve oxidación del barniz.
- · Excrementos de insecto.
- · Suciedad superficial.
- · Manchas de purpurina.
- · Pérdidas de preparación y policromía.
Pero, al realizar la limpieza, no puedes dejar de mirar la sonrisa que te devuelve la imagen limpia.